Los baños de sal se utilizan desde la antigüedad para tratar enfermedades y alcalinizar el cuerpo. Te das cuenta cuando te bañas en el mar que sales con una sensación regeneradora?

La sal marina tiene potentes propiedades que pueden beneficiarte mucho. Realmente las sales que se venden para el baño, son también sal marina mezclada con colorantes y aceites esenciales. Si en lugar de bañarte en el mar te sumerges en agua salada calentita es un completo tratamiento holístico.

En verano tenemos el mar muy disponible y bañarse en el mar es todo un placer. Durante el invierno prepara tu baño caliente con 2 kg de sal marina orgánica, sumérgete y piensa sólo en relajarte, es todo un tratamiento para la mente, el cuerpo y el alma. También puedes hacerte tu propio spray con sal marina y agua filtrada en proporción 5 gr por cada 100 ml y pulverizar todo el cuerpo, deja que seque y espera que actúe al menos 12 hr.

Te explico algunos de sus enormes beneficios:

Desintoxica el cuerpo

La sal marina es un desintoxicante natural del cuerpo. Cuando te sumerges en una bañera con 2 kg de sal (1 kg por cada 20 litros) se produce un proceso químico que hace que el cuerpo elimine toxinas e impurezas y se remineralice debido al alto contenido de sodio y magnesio de la sal. Hacerlo una vez por semana ayudará a tu cuerpo a mantenerse sano y fuerte.

Desinfecta tu piel de forma natural

De hecho la sal es un valioso limpiador y tiene propiedades anti bacterianas. Se utiliza para la limpiar heridas y porque ayuda a cicatrizar más rápido y acelera el proceso de coagulación de la sangre. Así que bañarte en agua salada en un excelente limpiador natural, muy eficaz por ejemplo en el tratamiento del acné. También puedes enjuagarte la boca con sal o lavarte el pelo mientras te bañas en agua salada.

Es exfoliante

El agua de mar tiene una composición muy similar a la nuestra y se ha utilizado históricamente para el tratamiento de muchas enfermedades sobre todo las de la piel. No te olvides de darte un suave masaje en círculos cuando te bañas en agua salada, o de hacerte tu propio exfoliante con sal y aceites. El resultado es excelente.

Relaja tu cuerpo y tu mente

Al ser rica en minerales contribuye a la relajación de los músculos y a mejorar los dolores de huesos. Un buen baño con sal te ayudará a tratar la retención de líquidos en las extremidades y alivia significativamente los dolores en las articulaciones.

Ayuda a combatir el insomnio

Una de las causas más comunes del insomnio es la falta de magnesio. La sal es muy rica en este mineral y puedes absorberlo a través de la piel, añade aceite esencial de lavanda y la noche de descanso está garantizada.