La prisa. Siempre con prisa. Todos tenemos prisa. Y parece que los plazos de entrega, las etiquetas, los alagos, son nuestra vara de medir y nos hacen compararnos, copiarnos, y estar siempre ‘aspirando a’ cuando en realidad lo que nos pide el cuerpo es vivir y actuar de forma auténtica. Cuando realmente vivimos y actuamos con autenticidad nos convertimos en un iman para las cosas que realmente queremos. Aceptar y fluir es el momento más liberador. Cuando te conectas con tu ser interno, tu misión de vida aflora y verdaderamente te olvidas de propuestas que quizá no son las que nos llenan de alegría.
Claramente esto no pasa de la noche a la mañana, es un proceso. Ser tu yo auténtico y no rendirte a ser lo que otros creen que es guay o lo que tus padres esperan, o lo que tú mismo crees que se espera de ti, no dejar que el miedo te impida ser tu mismo. Tú eres tú único yo y tienes el derecho de una vida feliz, abundante y hecha a tu medida.
Te invito a que revises tu vida para detectar con qué energía te mueves principalmente.
IMITADORES | Las personas que están siempre ‘ a punto de’ alcanzar alguna forma de autenticidad. Se encuentran a montones en el sector del bienestar, en el sector del arte y en todos los sectores. Copian y repiten lo que otros hacen y dicen pensando que de esta manera van a alcanzar el éxito como ellos. Pero esto es una verdadera estafa porque copiando, emulando y apropiándose del trabajo de otros sólo consiguen alejarse más de su propio magnetismo. Nunca tu autenticidad está ahí fuera.
PASIVOS |Las personas que dejan que la vida les pase, que tienen demasiado miedo de probar algo nuevo y simplemente hacen lo que se supone que deben hacer. Estas personas pueden despertar fácilmente cuando deciden enfrentar sus miedos y cambiar sus vidas. Aunque no lleguen a cambiar de ciudad (que les gustaría) y/o de trabajo (que lo desean) pueden elevar su magnetismo al conectarse con su autenticidad.
DESPIERTOS| Las personas que cada día despiertan con la intención de vivir un día que cuente. Siguen la corriente porque viven en coherencia con su ser interno, se dejan llevar desde el corazón y entonces las cosas simplemente les llegan y saben sacarles el mejor partido. Dicen que no a todo aquello que no les resuena completamente, establecen sanos límites en su trabajo y relaciones y nunca toman decisiones por miedo. Son conscientes de su propia abundancia y por eso son generosos y valientes, crean desde la intuición y confían plenamente en el universo que les trae exactamente lo que necesitan en cada momento.
Definitivamente cuando despiertas se empieza a materializar tu concepto más idealista de libertad. Y esto va creciendo transformándose y continúa siempre porque el proceso no termina. Deja que el universo que traiga todo aquello que necesitas en las formas más mágicas y perfectas.