Obviamente no voy a explicar aquí en profundidad lo que es neurociencia y todas sus vertientes y aplicaciones pero sí quiero explicarte a grandes rasgos cómo influye la neurociencia en nuestra vida diaria.

Las células de nuestro cerebro están conectadas mediante neurotrasmisores. Los neurotrasmisores son terminaciones nerviosas que cuando reciben información, fortalecen las conexiones neuronales y, con la repetición, se automatizan. Esto quiere decir básicamente que nuestros comportamientos, creencias y hábitos practicados de forma repetitiva se convierten en actos involuntarios y automáticos. Esto sería ideal si nuestras prácticas más frecuentes fueran de felicidad, armonía, seguridad y confianza. Pero la realidad es que la mayoría de nuestras conductas automatizadas provienen de nuestras experiencias en la infancia y las decisiones inconscientes que tomamos respecto a ellas.

Piensa en un lienzo en blanco que va recibiendo todos los brochazos de su entorno. Lo que pasará es que poco a poco se irá componiendo un propio lienzo.

Lo mismo sucede en tu mente: durante la infancia registras información que recibes de tu entorno y tomas decisiones respecto a tus experiencias, principalmente para asegurarte la supervivencia.

Heredas una serie de ideas y creencias que, a su vez, han sido heredadas. Y en tu cabeza de niño esas ideas empiezan a formar tu estructura de creencias sin discernir si son tóxicas y/o limitantes. Empiezas a estar condicionado y, aunque conscientemente puedes pensar que eres completo, hermoso y amoroso, tu subconsciente ya va en piloto automático. Y, sin saberlo, los miedos, heridas y el enfado están controlando tu presente.

Esto afecta a tus emociones, tus relaciones, tus reacciones y a tus decisiones. Imagina que registraste que ‘no me quieren’ en algún momento de tu infancia, todo lo que atraes en tu presente está condicionado por esa creencia. La relaciones y circunstancias que atraigas reforzarán esa creencia, construyendo un patrón que se repite una y otra vez.

Si quieres cambiar este patrón, debes reprogramar tu mente. Esto es posible gracias a la neuroplasticidad, que consiste muy básicamente en:

APAGAR EL PILOTO AUTOMÁTICO • Bajando la frecuencia de tus pensamientos, como en la meditación, tu cerebro entra en una frecuencia que se llama alpha o theta. En esta frecuencia tienes acceso a tu subconsciente, así puedes identificar y reemplazar tus creencias limitantes.

REPETICIÓN • La repetición te ayuda tanto a desbloquear los viejos patrones como a crear nuevas conexiones neuronales. Puedes cambiar tu programación a través de la neuroplasticidad con repetición.

Por eso las afirmaciones no pueden cambiar tu vida porque no pueden cambiar tus creencias.

Si quieres empezar a practicar puedes elegir uno de los talleres de El Biotiful Club y empezar a construir tu nueva vida.